Un poco de historia

A medida que la marihuana se vuelve más aceptada, los investigadores de todo el mundo están tratando de entender cómo funciona y cómo se pueden combatir algunas enfermedades con ella. La ciencia busca sonsacar los secretos de la marihuana.

No hay nada nuevo sobre el cannabis, por supuesto. Ha sido así casi siempre.

En Siberia se han encontrado semillas carbonizadas dentro de túmulos funerarios que datan de 3000 aC. Los chinos estaban utilizando cannabis como medicina hace miles de años. La marihuana es también profundamente americana, tan estadounidense como el George Washington. Para la mayor parte de la historia del país, el cannabis es legal, se encuentran comúnmente en tinturas y extractos.

Luego vino Reefer Madness, el asesino de la Juventud. El Herbicida. Durante casi 70 años, la planta pasó a la clandestinidad, y la investigación médica se detuvo en gran medida.
En 1970 el gobierno federal hizo aún más difícil de estudiar la marihuana, clasificándola como una droga, una sustancia peligrosa Lista I con ningún propósito médico válido y un alto potencial para el abuso, en la misma categoría que la heroína. En Estados Unidos la mayoría de la gente que quería ampliar el conocimiento sobre el cannabis estaban tratados como delincuentes por Definición.

Pero ahora, a medida que más y más personas están recurriendo al cannabis para el tratamiento de enfermedades, la ciencia del cannabis está experimentando un renacimiento. Estamos encontrando sorpresas, y, posiblemente milagros, ocultos dentro de esta planta.

Aunque la marihuana todavía es clasificada como una droga de Clase I, Vivek Murthy, el cirujano general de Estados Unidos, expresó recientemente su interés en lo que la ciencia va a aprender acerca de la marihuana, y señaló que los datos preliminares muestran que «para ciertas condiciones médicas y síntomas» puede ser «útil. «

En 23 estados y el Distrito de Columbia el cannabis es legal para algunos usos médicos, y la mayoría de los estadounidenses favorecen la legalización para uso recreativo. Otros países se lo están replanteando. Uruguay ha votado para legalizarla. Portugal ha despenalizado la misma. Israel, Canadá y los Países Bajos tienen programas de marihuana medicinal, y en los últimos años numerosos países han liberalizado las leyes de posesión.

La ciencia busca sonsacar los secretos de la marihuana

Para muchos, el cannabis se ha convertido en un tónico para el dolor, ayuda a dormir y estimula el apetito. También se piensa que es útil, entre otras cosas, como un analgésico, un broncodilatadores, y anti-inflamatorio.
Algunos científicos sostienen,que la planta tiene compuestos que pueden ayudar al cuerpo a regular las funciones vitales -tales como la protección del cerebro contra el trauma, la estimulación del sistema inmune, y ayuda en la «extinción de la memoria», después de eventos catastróficos.

Entonces nos hacemos estas preguntas:

A mediados del siglo 20, la ciencia todavía no entendía nada sobre la marihuana. A causa de su ilegalidad y la imagen contaminada, pocos científicos serios quisieron mancillar su reputación mediante el estudio de la misma.

El químico

En 1963, un químico orgánico joven en Israel llamado Rafael Mechoulam, que trabaja en el Instituto de Ciencia Weizmann las afueras de Tel Aviv, decidió mirar en la composición química de la planta.
Se le hacía extraño que los científicos no tubieran ni idea de cuál fuera el ingrediente psicoactivo principal fue en la marihuana. «Fue un desastre, una mezcla de compuestos no identificados».
Él y su grupo de investigación tuvo éxito en la síntesis total de los cannabinoides de la planta principales Δ9-tetrahidrocannabinol, cannabidiol, cannabigerol y varios otros. Para estos avances y muchos otros, Mechoulam es ampliamente conocido como el patriarca de la ciencia cannabis. Nacido en Bulgaria,es un miembro respetado de la Academia Israelí de Ciencias y Humanidades y profesor emérito de la Escuela de Medicina Hadassah de la Universidad Hebrea, donde todavía dirige un laboratorio. Raphael Mechoulam ha publicado más de 350 artículos científicos.

Profesor Mechoulam se ocupa de la historia del desarrollo de productos farmacéuticos y la investigación de los remedios herbales más populares. Entre otras cosas. Él estudió la historia del consumo de cannabis en los tiempos antiguos, y encontró que, contrariamente a las tradiciones de otros pueblos que utilisan el hachís, la droga no se menciona por su nombre en la Biblia. Lo atribuye a los hijos de Israel, haciendo una mueca a la cultura Asiria en el que el uso de drogas da ganancias.

Él nos dice:
«Sólo hemos arañado la superficie y mucho lamento no tener otra vida para dedicarme a este campo, para bien podemos descubrir que los cannabinoides están implicados de alguna manera en todas las enfermedades humanas».

La ciencia busca sonsacar los secretos de la marihuana. Fuente: ngm.nationalgeographic.com/2015/06/marijuana/sides-text y es.wikipedia.org/wiki/Raphael_Mechoulam